Sé que piensas que no puedo hablarte, que sólo soy un libro, pero quiero
que sepas que sentiré tus emociones, tus lamentos, tus sonrisas y tus
sentimientos, con cada frase que guardo dentro de mí.
Ábreme, tengo un regalo para ti. Sentirás un cosquilleo en tu alma,
en todo tu ser, en cada poro de tu piel.
Ven, ábreme y descubre lo Inefable…